Mostrando entradas con la etiqueta amor a la Iglesia. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta amor a la Iglesia. Mostrar todas las entradas

jueves, 8 de marzo de 2012

136 mil jóvenes estarán en vallas de seguridad por visita de Bene Edicto XVI a México

Se esperaba 100 mil


1
Jóvenes entusiastas por colaborar en seguridad de visita del Papa a León.

LEÓN, 06 Mar. 12 / 05:10 am (ACI/EWTN Noticias).- Hasta el momento la arquidiócesis de León en México ha inscrito a 136 mil jóvenes –cuando esperaban 100 mil– para colaborar en las vallas de seguridad en los lugares por los que pasará el Papa Benedicto XVI durante su visita entre el 23 y el 26 de marzo.

Según señala el Sistema Informativo de la Arquidiócesis de México (SIAME), el coordinador de logísticas de estas vallas, Manuel Sandoval, explicó que falta todavía registrarse algunos estudiantes voluntarios de varias escuelas e instituciones de formación de afiliación católica en la región de León.

Sandoval dijo además que ya los 25 mil jóvenes registrados para colaborar en la Misa del Parque Bicentenario de Guanajuato, ya han recibido formación catequética y están por recibir capacitación básica por parte del Estado Mayor Presidencial.

Dijo además que en el recorrido del aeropuerto al Colegio Miraflores (donde se hospedará el Papa) habrá 45 mil 333 voluntarios; del Colegio a la Catedral de León, algo más de 14 mil; y en el Centro de Guanajuato, donde el pontífice visitará la Casa del Conde Rul y la Plaza de la Paz, estarán ubicados 20 mil jóvenes.

Sandoval explicó que cuando se suprimió el límite de edad de los voluntarios, se elevó el número de registrados. "Nos estábamos olvidando de la generación de niños y jóvenes de Juan Pablo II", indicó.


martes, 28 de febrero de 2012

El drama de las prisiones superpobladas a merced de la violencia y el compromiso de la Iglesia

AMERICA -
2012-02-17

Roma (Agencia Fides) – El Santo Padre Benedicto XVI ha expresado su profundo pesar por las víctimas del incendio que el 15 de febrero ha asolado la cárcel de Comayagua, en Honduras, causando centenares de muertos y decenas de heridos (véase Fides 16/02/2012).

En un mensaje firmado por el Secretario de Estado, el Cardenal Tarcisio Bertone, Benedicto XVI eleva sus "fervientes oraciones" por los más de 350 muertos, expresando su "cercanía espiritual" a los miembros de la familia con la esperanza de una “rápida y plena recuperación de los heridos”.
 El Papa, en un momento "de tristeza tan grande", invoca para todos, “la amorosa protección de Nuestra Señora de Suyapa”.
La triste situación de hacinamiento en las cárceles de América Latina por desgracia está muy extendida, pero no falta el compromiso de la Iglesia para ayudar a los detenidos, e instar a las autoridades a resolver los problemas más acuciantes.
En Chile, la Iglesia ha denunciado en repetidas ocasiones esta dramática realidad: en diciembre de 2010, 81 encarcelados perdieron la vida en una rebelión provocada por la sobre-población (véase Fides 10/12/2011).
En Venezuela, a finales de julio de 2011, el Cardenal Urosa pidió al Ministro Iris Varela, adoptar medidas para mejorar las condiciones de más de 49.000 presos en el país.
Durante varios meses, el Cardenal Urosa y los obispos de Venezuela habían lanzado un llamamiento para resolver la situación de las cárceles nacionales, especialmente después de los terribles actos de violencia sucedidos en junio de 2011 en la cárcel del "Internado Judicial Capital El Rodeo I" en Guatire, en el Estado de Miranda (véase Fides 18/06/2011).
“Hay que construir nuevas prisiones.
Debemos urgentemente hacer frente a este problema.
No es posible que las cárceles estén como están ahora, controladas por los presos más violentos” ha afirmado el Cardenal Urosa (véase Fides 01/08/2011), reafirmando lo que ya había dicho precedentemente: “sólo con cambios efectivos en el sistema penitenciario del país podrá resolver este problema” (véase Fides 24/06/2011).
En México, la Iglesia Católica ha trabajado duro en 482 centros penitenciarios del país, donde hay más de 220.000 presos, y donde más de 4.000 trabajadores de pastoral realizan visitas pastorales al menos una vez a la semana.
En algunas cárceles no hay presencia de la Iglesia católica sólo porque las autoridades ponen dificultades al ser prisiones de máxima seguridad (véase Fides 13/07/2011).
A veces se han producido tensiones entre la Iglesia y las autoridades responsables, como el caso en el que a un obispo se le prohibió entrar en una cárcel del Estado porque se había atrevido a decir que los animales del zoológico estaban mejor alimentados que los presos de su diócesis.
En respuesta, el gobernador no le dejó entrar en ninguna prisión durante tres años. (véase Fides 13/07/2011).
En Colombia, según las últimas estadísticas del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (INPEC), las infraestructuras carcelarias colombianas tienen una capacidad para 72,785 detenidos pero actualmente existen cerca de 91 mil.
El problema del hacinamiento en las cárceles fue uno de los temas que se abordó en el Encuentro Regional del Centro de la Pastoral Penitenciara en el 2011 (véase Fides 11/06/2011).
En El Salvador, 23 delincuentes juveniles murieron en el incendio de noviembre de 2010 (véase Fides 15/11/2010).
La Iglesia en El Salvador en el pasado ya había expresado su preocupación sobre la situación de las cárceles en el país (véase Fides 11/10/2010).
La prisión de Ilobasco es un centro de detención para jóvenes mayores de 18 años condenados cuando eran menores de edad y que no puede cumplir sus condenas en cárceles de adultos. De hecho, las víctimas del incendio tenían entre 19 y 25 años de edad.
Según las cifras dadas a conocer por los medios de comunicación, el sistema penitenciario en El Salvador tiene una población de 15.207 reclusos. De estos, 14.280 son hombres y 927 son mujeres. Mientras que en curso de proceso, en espera de una sentencia definitiva se encuentran otros 8.324 (7.073 hombres y 1.251 mujeres) (CE) (Agencia Fides,


domingo, 26 de febrero de 2012

La JMJ mejoró la imagen de la Iglesia

La Razón (España)

La Embajada de España ante la Santa Sede analiza los frutos del encuentro de Madrid seis meses después

La JMJ dejó un recuerdo imborrable en muchas personas, y también en las redes sociales - Foto: Reuters
22 Febrero 12 - - Darío Menor

CIUDAD DEL VATICANO– «La Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) ha sido una oportunidad bien aprovechada. Se pretendía mejorar la imagen que los jóvenes tienen de Jesucristo y de la propia Iglesia y se ha logrado». Seis meses después de la conclusión de la JMJ, el encuentro de jóvenes con el Papa que congregó a cerca de dos millones de personas en Madrid, el arzobispo Claudio Maria Celli, presidente del Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales, analizó los resultados de esta experiencia y el desafío informativo que supuso para la Iglesia.

En una mesa redonda organizada ayer por la Embajada de España ante la Santa Sede en la que participó el responsable de redes sociales de la JMJ y varios periodistas italianos y españoles, Celli destacó que este encuentro fue un «momento particular y precioso» para la vida de la Iglesia y logró convertirse en una «noticia en todo el mundo».

El arzobispo se preguntó sobre dónde está «de verdad» hoy el hecho noticioso e individualizó tres riesgos a los que la Iglesia debe hacer frente: la representación de lo insignificante, la desinformación y la instrumentalización.

Ante este «contexto posmoderno» Celli citó a Benedicto XVI: «También hoy se habla mucho de la Iglesia de Roma. Esperemos que se hable también de nuestra fe». Antonio Gayo, responsable de redes sociales de la JMJ, calificó de «generación de la esperanza» a los jóvenes que se reunieron en Madrid y explicó que, seis meses después, este evento sigue siendo noticia. «Queríamos crear una red en internet que perviviese a la JMJ. Los usuarios han sido muy activos. Hoy siguen hablando de Madrid y se preparan para el próximo encuentro, que tendrá lugar en Brasil», dijo Gayo, quien destacó que la Iglesia católica es en sí misma una «red social analógica» con una gran capacidad para transmitir mensajes de forma muy rápida.

Gayo ofreció unas cifras que dan idea de la repercusión que la JMJ ha logrado en internet. Medio millón de personas la ha seguido a través de las redes sociales, sus vídeos han sido vistos dos millones de veces, ha logrado ser tres veces «trending topic» mundial y su web oficial lleva más de seis millones de visitas. «En Madrid se vio que la Iglesia tiene mucho que decir», concluyó Gayo.

Juan Rubio, director de la revista religiosa «Vida Nueva», destacó que la JMJ marcó un «antes y un después» en la comunicación y que enseñó un nuevo lenguaje a los periodistas: «Nos recordó que los jóvenes son portadores de esperanza. Aquellos días vimos una revolución juvenil distinta, sin imágenes del Che ni el Libro Rojo de Mao. Lo que llevaban aquellos muchachos era el Youcat, el catecismo de los jóvenes».


jueves, 16 de febrero de 2012

De 12 a 72 las ciudades europeas en misión como los discípulos

El arzobispo Fisichella acerca de las perspectivas de la nueva evangelización en el Año de la fe

Será Benedicto XVI quien inaugurará el Año de la fe el próximo 11 de octubre, quincuagésimo aniversario del inicio del  Concilio Vaticano II, con una celebración en la que estarán presentes los padres sinodales que participen en la asamblea general sobre el tema «La nueva evangelización para la transmisión de la fe cristiana».
Lo refiere el arzobispo Rino Fisichella, presidente del Consejo Pontificio para la promoción de la nueva evangelización, en esta entrevista a nuestro periódico.
El prelado anticipa también que la «misión metrópolis» se extenderá de doce a setenta y dos ciudades europeas. Cifras que cobran un evidente valor simbólico, pues se pasa del corto número de los Apóstoles al más amplio de los primeros discípulos enviados por Cristo.
El 9 de enero se tuvo en el Vaticano el segundo encuentro de responsables de la «misión metrópolis», proyecto pastoral al que se han adherido doce grandes ciudades del antiguo continente.
¿A qué conclusiones se llegó?
Desde la primera reunión, que se celebró el mes de julio del año pasado,  las doce ciudades comprometidas en este signo de evangelización común y participado han acogido la iniciativa con entusiasmo, inesperado.
Se manifiesta una gran vitalidad en todas las metrópolis presentes, que ven la misión como una posibilidad real de acción pastoral, capaz de influir en la vida diaria de las personas.
La Cuaresma se vio como una feliz oportunidad, porque la lectura de la Palabra de Dios, las catequesis del obispo, la celebración del sacramento de la Reconciliación, unidas al signo de caridad, pueden ser también una señal evidente  del compromiso de los cristianos de anunciar el Evangelio de Jesús en nuestros días.
Impresiona positivamente la aprobación unánime que ha encontrado mi propuesta de extender en el año 2013 esta experiencia a 72 grandes ciudades de Europa. Y esto es importante.
Las Indicaciones pastorales publicadas por la Congregación para la doctrina de la fe el pasado 6 de enero interpelan directamente al Consejo Pontificio para la promoción de la nueva evangelización, estableciendo la institución —en el seno del dicasterio— de una secretaría para coordinar las distintas iniciativas que atañen al Año de la fe.
¿Qué se está haciendo al respecto?
Estamos avanzando, teniendo en cuenta que no hay mucho tiempo. Estamos constituyendo la secretaría, que en cierto sentido deberá ser el alma de todas las iniciativas.
Como dice la Nota, dichas iniciativas se realizarán sobre todo a nivel de Iglesia universal, especialmente aquí en Roma con la presencia del Papa.
 Además, habrá comunicación y participación entre lo que se realice en las distintas Iglesias locales o a nivel de asociaciones y movimientos.
Ya tenemos programada una primera reunión con los jefes de los dicasterios implicados más directamente en el Año de la fe, para poder fijar un calendario básico.

En el documento se lee también que la secretaría deberá abrir una nueva página web. ¿Se está preparando?

Estamos trabajando en una página web que pueda ofrecer toda clase de informaciones útiles para vivir de modo eficaz el Año de la fe y para poner en comunicación las diversas realidades implicadas.
A mediados de enero comenzamos el estudio con algunos expertos de comunicación a fin de preparar oportunamente el portal.

¿Qué otras citas tiene previstas el Consejo Pontificio para 2012?

Ante todo podemos anticipar que el inicio del Año de la fe coincidirá con la solemne celebración del Santo Padre en la que se recordará el quincuagésimo aniversario de la apertura del Concilio Vaticano II.

Se trata de un momento muy significativo dado que el Papa firmó la Carta apostólica el 11 de octubre de 2011, como para reafirmar que las fechas son tan importantes que merecen no sólo recordarse, sino también celebrarse.

Es la mejor manera de conmemorar ese acontecimiento que caracterizó ciertamente el siglo XX de la historia de la Iglesia, y por eso merece una celebración totalmente peculiar, considerando que estarán presentes también todos los padres  sinodales que participen en la asamblea sobre la nueva evangelización y transmisión de la fe.

  Gianluca Biccini
3 de febrero de 2012

[palabras clave: Evangelización]





lunes, 6 de febrero de 2012

. El Obispo de Lincoln advierte a sus fieles que deben afrontar la cárcel antes que obedecer las leyes antivida de Obama

Reacción unánime del episcopado de EE.UU

El obispo de Lincoln (Nebraska), Mons. Fabian W. Bruskewitz, ha asegurado que los católicos estadounidenses deben prepararse para sufrir, incluso la cárcel, tras la decisión del gobierno de Obama de obligar a pagar seguros que incluyen anticoncepción, esterilización y fármacos abortivos. «No podemos y no cumpliremos esta injusta norma», escribió el prelado en una carta que ordenó fuera leída en la Misa del domingo 29 de enero en toda su diócesis.

01/02/12 6:41 AM |

(Aci) La secretaria del departamento de Salud y Servicios Humanos, Kathleen Sebelius, quien afirma ser católica, ha dado un plazo de un año a las instituciones religiosas para acatar la norma. "Esto significa que todos nuestros hospitales católicos, escuelas, agencias de servicios sociales y similares serán obligados a participar del mal", explica el obispo.
"Como los mártires de los primeros días, tenemos que estar preparados para aceptar el sufrimiento que podría incluir altas multas y la cárcel. Nuestra libertad religiosa en Estados Unidos está en grave peligro", advierte Mons. Bruskewitz. El prelado dijo además que la Iglesia "ha pedido al Presidente Obama que rescinda esta ley, pero todas las solicitudes han encontrado una pared y han llegado a oídos sordos" en la administración.
El obispo de Lincoln es uno de los muchos prelados de la Iglesia en Estados Unidos que ha hablado sobre este controvertido tema. En la diócesis de Phonenix, los católicos escucharon un mensaje de Mons Thomas J. Olmsted, quien señaló que la gente de fe no puede "ser relegada a ser ciudadanos de segunda clase" ni "despojada de sus derechos dados por Dios".
El obispo de Marquette, en el estado de Michigan, Mons. Alexander K. Sample, afirmó que si esta ley entra en vigor "nosotros los católicos nos veremos obligados a violar nuestras conciencias o a dejar la cobertura de salud para nuestros empleados y sufrir las penalidades por hacer eso". El Arzobispo de Nueva Orleans, Mons. Gregory M. Aymond, resaltó por su parte en su carta del fin de semana que es necesario actuar ante este "ataque sin precedentes a la libertad religiosa".


domingo, 5 de febrero de 2012

El Arzobispo de Los Ángeles tendrá un programa mensual en la televisión

Tras el éxito de su programa de radio

Tras el éxito de su programa radial «Diálogos de fe», transmitido cada semana, el Arzobispo de Los Ángeles (Estados Unidos), Mons. José Gómez, ahora tendrá un espacio mensual en la televisión. Según informó a ACI Prensa María Hilda González, una de las conductoras del programa con el prelado, en la primera parte del espacio Mons. Gómez dialogará junto con el presentador sobre un tema seleccionado.
Luego conversará con el público asistente sobre el mismo tema y, a su vez, recibirá llamadas en vivo de los televidentes.

30/01/12 7:26 AM

(IC) Desde su llegada a la Archidiócesis de Los Ángeles, la más grande de Estados Unidos, Mons. Gómez deseó mantener una cercanía con sus fieles, además de aportar la experiencia que traía de San Antonio, estado de Texas, en donde fue Arzobispo. Así, señala Salvador Hernández de ESNE TV, "se decidió preparar un espacio por las radios católicas existentes en Los Ángeles".
El programa se transmite desde julio de 2010. En poco tiempo, señala Hernández, logró gran audiencia por lo que reconsideró cambiar a un programa mensual "con la variante que ahora sería por la televisión".
El programa será emitido en vivo desde el 17 de febrero a las 6:00 p.m. (hora del Pacífico o GMT-8). Con esto países como Perú o Colombia podrán ver a Mons. Gómez a las 9:00 p.m.; mientras que en Argentina será a las 11:00 p.m.
En la ciudad de Los Ángeles la transmisión será por el canal KDOC 56.2 y KXLA 44.En España, México y
centro y sur de América con el mismo horario de California y en la señal de cable a través de ESNE TV, también se podrá seguir el programa. (Listado de países: http://elsembradorministries.com/esne/ESNE-TV/cobertura.html)
ESNE TV también permite a los usuarios en Internet poder ver el programa a través de http://elsembradorministries.com/esne/ESNE-TV/esnetvenvivo.html


sábado, 4 de febrero de 2012

Cardenal Sandoval se despide ante miles de feligreses

El cardenal Sandoval Íñiguez se mostró receptivo a las muestras de cariño.

 NTX El 7 de febrero entregará la estafeta del Arzobispado de Guadalajara
Cerca de 500 parroquias organizan homenaje al arzobispo, luego de 18 años al frente de Arquidiócesis de Guadalajara
GUADALAJARA, JALISCO (29/ENE/2012).- El arzobispo de Guadalajara, Juan Sandoval Íñiguez, se despidió en la misa homenaje que se celebró en el Auditorio Benito Juárez esta mañana, organizada por cerca de 500 parroquias tapatías en vísperas de su relevo como líder de la Iglesia católica en el Occidente de México.

El purpurado agradeció la participación de los 12 mil asistentes, según los organizadores (ocho mil, conforme a información de Protección Civil), a quienes hizo un llamado a seguir por el camino del cristianismo.

En su homilía expresó: "El profeta es cada cristiano por su bautismo. Es obligación del laico no sólo recibir la palabra de Dios, sino transmitirla (...), porque a la hora del testimonio, a la hora del trabajo, se les olvida, dicen que eso ya no les toca".

En una misa que contó con la presencia de la imagen de la Virgen de Zapopan, y acompañado por feligreses de las parroquias del Arzobispado local, el cardenal Sandoval Íñiguez se mostró receptivo a las muestras de cariño, pues luego de su sermón, fue aplaudido, al igual que al término de la ceremonia religiosa.

Los políticos no entienden, dice el arzobispo

Minutos después de la misa, que dio inicio al mediodía, el arzobispo dijo a los medios de comunicación que en el ámbito político él insiste a los fieles católicos que tomen decisiones con base al estudio de las propuestas. "Y no ya que van a las urnas, sino desde antes". Cuestionado sobre qué le aconsejaría a los políticos, Sandoval Íñiguez refirió: "A ellos ya no les digo nada, nunca entienden".

Rodeados de pancartas, como "Querido Cardenal, que Dios recompense todos tus desvelos y te permita seguir por muchos años más sirviendo a la Iglesia", y luego de la ceremonia Eucarística, los asistentes pudieron disfrutar de tortas ahogadas, tacos dorados y agua fresca de jamaica, mismos que fueron patrocinados por las parroquias de la ciudad.


jueves, 2 de febrero de 2012

Manual de la Iglesia católica de Hong Kong aumentan los fieles disminuyen los sacerdotes

2012-01-28

ASIA/HONG KONG

Hong Kong (Agencia Fides) – Teniendo en cuenta los datos publicados desde 1954 hasta 2011 en el "Hong Kong Catholic Church Directory" (Manual de la Iglesia Católica en Hong Kong), la Comisión Diocesana para la construcción y desarrollo de la diócesis de Hong Kong acaba de publicar "La estadísticas de la Diócesis", que presenta las estadísticas relativas a las parroquias, sacerdotes, religiosos/as y centros educativos y de servicios sociales, y toda la información sobre las estructuras y el compromiso de la Iglesia en Hong Kong.
Según cuanto informa Kong Ko Bao (la versión china del boletín diocesano), la Comisión ha subrayado que la publicación es una respuesta a las necesidades del Año de los Laicos, que se está celebrando en la diócesis: “Las estadísticas muestran un aumento de los fieles y una disminución de los sacerdotes. De ahí proviene una invitación a una mayor y más profunda colaboración entre los sacerdotes, religiosos y laicos para construir juntos la Iglesia, especialmente en el Año de los Laicos”.

Según cuanto ha dicho Mons. Domingo Chang, Vicario diocesano, durante la presentación del estudio, hoy la Iglesia de Hong Kong tiene una población de 350 mil fieles locales, a los que se añaden los trabajadores domésticos filipinos y otros extranjeros, alcanzando la cifra de 530 mil.
 En 2011 hubo 6.200 bautismos (2.700 niños, 3.500 adultos). Es también urgente la necesidad de nuevas vocaciones. Actualmente, el porcentaje de fieles por cada sacerdote es de 2.300 personas.
En 2009, cada sacerdote se hizo cargo de 1.200 fieles, un año después esa cifra ya había aumentado a 1.715.
La realidad requiere la necesidad de una coordinación adecuada para satisfacer las necesidades de los servicios pastorales y sociales: los jóvenes, los ancianos, los discapacitados siguen aumentando, pero los niños han disminuido en la sociedad, llegando al más bajo porcentaje de nacimientos. Además, según el texto que describe el desarrollo de la Iglesia de Hong Kong en el período 1954 a 1974 los católicos aumentaron de 200 mil unidades, con la llegada de refugiados desde el continente .


(NZ) (Agencia Fides 2012/01/28)

lunes, 30 de enero de 2012

Para una nueva evangelización de los ambientes científicos

Noticia del 25/01/2012 10.36.52


(RV).- La Santa Sede informa en un comunicado de prensa que el Santo Padre erigió la nueva Fundación “Ciencia y Fe, promovida por el Consejo pontificio para la cultura y por algunas Universidad Pontificias. En efecto, el pasado 10 de enero, el Cardenal Tarcisio Bertone, Secretario de Estado, hizo público que Benedicto XVI constituyó esta Fundación con sede en el Estado de la Ciudad del Vaticano, dotándola de personalidad jurídica pública canónica y civil.

La Fundación –creada a petición del Cardenal Gianfranco Ravasi, Presidente del Consejo pontificio para la cultura haciendo propios los deseos de algunas Universidades Pontificias romanas– dará de este modo continuidad y estabilidad al “Proyecto ciencia, teología y cuestión ontológica”, que nacido tras los desarrollos de la Comisión de estudio del Caso Galilei, –instituida por el Beato Juan Pablo II desde el año 2003– ha promovido el diálogo entre la teología, la filosofía y las ciencias naturales a través de iniciativas de estudio, investigación y divulgación cultural, también gracias al soporte de diversas instituciones, entre las cuales la Fundación John Templeton.

La Fundación “Ciencia y fe, que es la primera de este tipo en el Vaticano, seguirá la constante y cualificada colaboración que se ha instaurado en los últimos años entre el Consejo pontificio para la cultura y algunas Universidades pontificias como la Lateranense, la Gregoriana, el Ateneo Regina Apostolorum, el Angelicum, la Salesiana, la Urbaniana y la de la Santa Cruz, y permanecerá ligada a este dicasterio a través de su presidente, si bien gozará de amplia autonomía para realizar diversos proyectos, también a través de estos centros de estudio. De este modo, esta nueva Fundación se convertirá en un sólido centro de referencia ante la Santa Sede para una nueva evangelización de los ambientes científicos. (María Fernanda Bernasconi – RV).

sábado, 28 de enero de 2012

Andrea Brugnoli Evangelizar como la música requiere técnica»

Sacerdote y formador

Centinelas de la Mañana aplica sus métodos en 40 diócesis de Italia

Andrea Brugnoli y jóvenes de Centinelas de la Mañana almuerzan en las calles de Roma, reponiendo fuerzas para evangelizar por la calle - Foto: Sentinelle del Mattino
24 Enero 12 - - Pablo J. Ginés

MANRESA (BARCELONA)- Andrea Brugnoli es el sacerdote fundador de Centinelas de la Mañana, un proyecto para entrenar a jóvenes (y no tan jóvenes) en los métodos de la nueva evangelización. Lo entrevistamos en el Congreso de Nueva Evangelización de Manresa, donde estuvo formando a muchos chavales de las diócesis de Vic y de Solsona, las anfitrionas, y a responsables juveniles de otras muchas diócesis.

–Hay quien dice que evangelizar no requiere métodos, que basta con dar un buen ejemplo personal y confiar en el Espíritu Santo.

–Si quieres ser un gran pianista necesitas tener una técnica perfeccionada y así serás libre para expresar luego tus sentimientos, los de la obra, etc. Con la evangelización pasa lo mismo: cuanta más técnica tengas, más puedes poner al servicio del Espíritu Santo. La técnica es buena: nos ayuda a dejar intervenir a Dios. La evangelización no es algo espontáneo, requiere saber hacerlo. Tener un método como el nuestro te ayuda y te hace cobrar conciencia de que ¡tú puedes! El joven que aplica alguno de nuestros métodos cobra conciencia de que puede y debe evangelizar, y le coge el gusto, así que lo hará luego en su vida cotidiana, en la universidad, con la familia y con los amigos.

–¿Qué tienen en común los nuevos métodos de evangelización como los que se han explicado en este congreso de Manresa?

–Todas estas metodologías dejan que el Espíritu Santo tenga el protagonismo: Él es el verdadero evangelizador. Son métodos que parten del anuncio del kerigma, es decir, el anuncio de que Dios te ama personalmente, que te salva, te perdona y te transforma. No tenemos que dar por hecho que nuestros parroquianos hayan recibido el kerigma. Pero tampoco podemos usar esos métodos sin libertad. Por ejemplo, no podemos decir «si no haces un Curso Alpha no bautizo a tus hijos». Creo que no funcionan con quien solo viene buscando sacramentos. Hay que dejar libertad a la persona, para que actúe el Espíritu.

–¿Y después del kerigma?

–Hay que trabajar dos cosas: el «in» y el «out», es decir, el salir afuera a anunciar el Evangelio y el saber acoger. No tiene sentido salir a la calle a dar kerigma si nuestro grupo o parroquia no está preparada para acoger y recibir a los nuevos conversos o personas que se interesan. Quien ya ha tenido un encuentro con Dios, pero aún no con la Iglesia, necesita a un evangelizador que le acompañe, le apadrine. Tenemos un método llamado «La barca», un grupo de jóvenes acogedores, de su edad y nivel, que reciben a estas personas que vienen de la calle, de la increencia, y que aún no puedes enviar directamente a misa o a Acción Católica o a la vida parroquial plena. Se llama «La barca» porque Jesús no solo pescaba en barca: ¡también llevaba los peces a la orilla!

–¿Siempre hay que mencionar la palabra «Jesús»?

–Si en la Iglesia intentamos imitar al mundo, nadie nos escuchará. Si alguien ve que un joven habla de Jesús se pregunta: «¿y éste, por qué cree?» Y quizá empiecen a dialogar. Cuando nuestros chicos salen a la calle a evangelizar tienen miedo, claro, pero lo hacen por obediencia a Jesús, que lo pide. Pablo VI, en «Evangelium Nuntiandii», ya decía que dar un buen testimonio de vida, sin anunciar explícitamente a Jesús, no es suficiente. El nombre de Jesús es eficaz.

–Kerigma por la calle, «La barca», cursos Alpha de evangelización... ¿qué otros métodos usáis?

–El método de las células tiene mucho éxito en todas las edades. Es un grupo pequeño de gente que evangeliza en su ambiente, suma más miembros invitando amigos y conocidos, y cuando ha crecido se divide creando otra célula. En Italia está extendiéndose bastante. Evangelizar es algo que todos debemos hacer, aunque no todos salgamos a la calle. El igual evangeliza al igual: los niños a los niños, los ancianos a los ancianos, los casados a los casados. Tener esa gente con deseo misionero va antes que cualquier método.

–¿Sois un movimiento?

–No, jurídicamente los Centinelas somos sólo un proyecto, unos métodos. A mí nadie me llama fundador. No tenemos espiritualidad propia. Yo enseño la metodología, me voy y los jóvenes de ese grupo o diócesis lo aplican. No tenemos red ni estructura de movimiento.

PERFIL

De la Santa Sede a las calles

Andrea Brugnoli, sacerdote de la diócesis de Verona, trabajaba en la Santa Sede en tareas más o menos rutinarias cuando se sintió en 1997 llamado a formar jóvenes para que fuesen evangelizadores activos. Su obispo le dio permiso y nació Centinelas de la Mañana, primero en Verona, y hoy extendido a 40 diócesis italianas, «grandes y pequeñas, urbanas y rurales», explica. Centinelas entrena en métodos que pueden emplear las diócesis, las parroquias y los grupos de laicos de cualquier estilo o espiritualidad, sin depender de ningún movimiento. «Es para todos», dice.

«FASHIONÍSIMO»

En un país que cuida tanto la imagen como Italia, Centinelas de la Mañana trabaja mucho la «primera sensación», el uso de música actual y la decoración de localidades para que sea todo, en sus palabras, «fashionísimo».


Llevarán mensaje papal y de la Iglesia a los no católicos

Notimex Notimex mié 25 ene 2012 19:16

México, 25 Ene. (Notimex).- Para llevar el mensaje de la Iglesia católica a los no católicos durante la visita del papa Benedicto XVI al país, se creó el Capítulo México de Catolic Voices, integrado por 20 jóvenes, informó la coordinadora del proyecto, Marilú Esponda Sada.

Explicó que esta iniciativa es consecuencia de la iniciada durante la visita del jerarca católico a Londres, Inglaterra, por el periodista Jack Valero Austen, quien formó un grupo de laicos católicos para difundir el mensaje de la Iglesia católica y de Benedicto XVI.

Refirió que a través de su presencia en los medios de comunicación y del trabajo de difusión, los católicos ingleses lograron su cometido y ante el buen resultado esta organización se decidió extenderla a otros países.

Por ello, con motivo de la visita del papa a México, en marzo, un grupo de católicos mexicanos decidió replicar la iniciativa inglesa, por lo que este miércoles iniciaron el "casting" para reclutar a los 20 jóvenes, hombres y mujeres, que integrarán el Capítulo México, precisó.

Marilú Esponda explicó que los jóvenes que resulten electos recibirán un intensivo curso de capacitación para ser capaces de difundir en los medios que los inviten, el mensaje de la Iglesia católica en general y del papa Benedicto XVI, en particular.

Comentó que la sociedad en su conjunto se ha alejado de Dios y de sus enseñanzas, con la consecuente deshumanización, por ello el grupo México de Catolic Voices, trabajará de manera permanente aún después de la visita del papa.

Se trata de un grupo de profesionistas con diferentes especialidades que están dispuestos a defender las posturas de la Iglesia católica donde quiera que sean convocados para ello, expuso.

A pregunta expresa, afirmó que no son patrocinados por empresa o institución alguna, aun cuando sí están solicitando financiamiento de cualquiera que pueda y quiera ayudarlos, pero aun sin recursos seguirán desarrollando su trabajo.

domingo, 1 de enero de 2012

Educar a los jóvenes en la justicia y la paz

Mensaje de su santidad Benedicto XVI para la celebración de la Jornada Mundial de la Paz 2012

1 enero 2012

En otros idiomas

http://www.vatican.va/holy_father/benedict_xvi/messages/peace/index_sp.htm


1. EL COMIENZO DE UN AÑO NUEVO, don de Dios a la humanidad, es una invitación a desear a todos, con mucha confianza y afecto, que este tiempo que tenemos por delante esté marcado por la justicia y la paz.

¿Con qué actitud debemos mirar el nuevo año? En el salmo 130 encontramos una imagen muy bella. El salmista dice que el hombre de fe aguarda al Señor «más que el centinela la aurora» (v. 6), lo aguarda con una sólida esperanza, porque sabe que traerá luz, misericordia, salvación. Esta espera nace de la experiencia del pueblo elegido, el cual reconoce que Dios lo ha educado para mirar el mundo en su verdad y a no dejarse abatir por las tribulaciones.

Os invito a abrir el año 2012 con dicha actitud de confianza. Es verdad que en el año que termina ha aumentado el sentimiento de frustración por la crisis que agobia a la sociedad, al mundo del trabajo y la economía; una crisis cuyas raíces son sobre todo culturales y antropológicas. Parece como si un manto de oscuridad hubiera descendido sobre nuestro tiempo y no dejara ver con claridad la luz del día.

En esta oscuridad, sin embargo, el corazón del hombre no cesa de esperar la aurora de la que habla el salmista. Se percibe de manera especialmente viva y visible en los jóvenes, y por esa razón me dirijo a ellos teniendo en cuenta la aportación que pueden y deben ofrecer a la sociedad. Así pues, quisiera presentar el Mensaje para la XLV Jornada Mundial de la Paz en una perspectiva educativa: «Educar a los jóvenes en la justicia y la paz», convencidos de que ellos, con su entusiasmo y su impulso hacia los ideales, pueden ofrecer al mundo una nueva esperanza.

Mi mensaje se dirige también a los padres, las familias y a todos los estamentos educativos y formativos,así como a los responsables en los distintosámbitos de la vida religiosa, social, política, económica, cultural y de la comunicación. Prestar atención al mundo juvenil, saber escucharlo y valorarlo, no es sólo una oportunidad, sino un deber primario de toda la sociedad, para la construcción de un futuro de justicia y de paz.

Se ha de transmitir a los jóvenes el aprecio por el valor positivo de la vida, suscitando en ellos el deseo de gastarla al servicio del bien. Éste es un deber en el que todos estamos comprometidos en primera persona.

Las preocupaciones manifestadas en estos últimos tiempos por muchos jóvenes en diversas regiones del mundo expresan el deseo de mirar con fundada esperanza el futuro. En la actualidad, muchos son los aspectos que les preocupan: el deseo de recibir una formación que les prepare con más profundidad a afrontar la realidad, la difi cultad de formar una familia y encontrar un puesto estable de trabajo, la capacidad efectiva de contribuir al mundo de la política, de la cultura y de la economía, para edificar una sociedad con un rostro más humano y solidario.

Es importante que estos fermentos, y el impulso idealista que contienen, encuentren la justa atención en todos los sectores de la sociedad. La Iglesia mira a los jóvenes con esperanza, confía en ellos y les anima a buscar la verdad, a defender el bien común, a tener una perspectiva abierta sobre el mundo y ojos capaces de ver «cosas nuevas» (Is 42,9; 48,6).

Los responsables de la educación

2. La educación es la aventura más fascinante y difícil de la vida. Educar –que viene de educere en latín– significa conducir fuera de sí mismos para introducirles en la realidad, hacia una plenitud que hacer crecer a la persona. Ese proceso se nutre del encuentro de dos libertades, la del adulto y la del joven.

Requiere la responsabilidad del discípulo, que ha de estar abierto a dejarse guiar al conocimiento de la realidad, y la del educador, que debe de estar dispuesto a darse a sí mismo. Por eso, los testigos auténticos, y no simples dispensadores de reglas o informaciones, son más necesarios que nunca; testigos que sepan ver más lejos que los demás, porque su vida abarca espacios más amplios. El testigo es el primero en vivir el camino que propone.

¿Cuáles son los lugares donde madura una verdadera educación en la paz y en la justicia? Ante todo la familia, puesto que los padres son los primeros educadores. La familia es la célula originaria de la sociedad. «En la familia es donde los hijos aprenden los valores humanos y cristianos que permiten una convivencia constructiva y pacífica. En la familia esdonde se aprende la solidaridad entre las generaciones, el respeto de las reglas, el perdón y la acogida del otro».1 Ella es la primera escuela donde se recibe educación para la justicia y la paz.

Vivimos en un mundo en el que la familia, y también la misma vida, se ven constantemente amenazadas y, a veces, destrozadas. Unas condiciones de trabajo a menudo poco conciliables con las responsabilidades familiares, la preocupación por el futuro, los ritmos de vida frenéticos, la emigración en busca de un sustento adecuado, cuando no de la simple supervivencia, acaban por hacer difícil la posibilidad de asegurar a los hijos uno de los bienes más preciosos: la presencia de los padres; una presencia que les permita cada vez más compartir el camino con ellos, para poder transmitirles esa experiencia y cúmulo de certezas que se adquieren con los años, y que sólo se pueden comunicar pasando juntos eltiempo. Deseo decir a los padres que no se desanimen. Que exhorten con el ejemplo de su vida a los hijos a que pongan la esperanza ante todo en Dios, el único del que mana justicia y paz auténtica.

Quisiera dirigirme también a los responsables de las instituciones dedicadas a la educación: que vigilen con gran sentido de responsabilidad para que se respete y valore en toda circunstancia la dignidad de cada persona. Que se preocupen de que cada joven pueda descubrir la propia vocación, acompañándolo mientras hace fructificar los dones que el Señor le ha concedido. Que aseguren a las familias que sus hijos puedan tener un camino formativo que se contradiga con su conciencia y principios religiosos.

Que todo ambiente educativo sea un lugar de apertura al otro y a lo transcendente; lugar de diálogo, de cohesión y de escucha, en el que el joven se sienta valorado en sus propias potencialidades y riqueza interior, y aprenda a apreciar a los hermanos. Que enseñe a gustar la alegría que brota de vivir día a día la caridad y la compasión por el prójimo, y de participar activamente en la construcción de una sociedad más humana y fraterna.

Me dirijo también a los responsables políticos, pidiéndoles que ayuden concretamente a las familias e instituciones educativas a ejercer su derecho-deber de educar. Nunca debe faltar una ayuda adecuada a la maternidad y a la paternidad. Que se esfuercen para que a nadie se le niegue el derecho a la instrucción y las familias puedan elegir libremente las estructuras educativas que consideren más idóneas para el bien de sus hijos. Que trabajen para favorecer el reagrupamiento de las familias divididas por la necesidad de encontrar medios de subsistencia. Ofrezcan a los jóvenes una imagen límpida de la política, como verdadero servicio al bien de todos.

No puedo dejar de hacer un llamamiento, además, al mundo de los medios, para que den su aportación educativa. En la sociedad actual, los medios de comunicación de masas tienen un papel particular: no sólo informan, sino que también forman el espíritu de sus destinatarios y, por tanto, pueden dar una aportación notable a la educación de los jóvenes. Es importante tener presente que los lazos entre educación y comunicación son muy estrechos: en efecto, la educación se produce mediante la comunicación, que influye positiva o negativamente en la formación de la persona.

También los jóvenes han de tener el valor de vivir ante todo ellos mismos lo que piden a quienes están en su entorno. Les corresponde una gran responsabilidad: que tengan la fuerza de usar bien y conscientemente la libertad. También ellos son responsables de la propia educación y formación en la justicia y la paz.

Educar en la verdad y en la libertad

3. San Agustín se preguntaba: «Quid enim fortius desiderat anima quam veritatem? - ¿Ama algo el alma con más ardor que la verdad?».2 El rostro humano de una sociedad depende mucho de la contribución de la educación a mantener viva esa cuestión insoslayable. En efecto, la educación persigue la formación integral de la persona, incluida la dimensión moral y espiritual del ser, con vistas a su fin último y al bien de la sociedad de la que es miembro. Por eso, para educar en la verdad es necesario saber sobre todo quién es la persona humana, conocer su naturaleza.

Contemplando la realidad que lo rodea, el salmista reflexiona: «Cuando contemplo el cielo, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que has creado. ¿Qué es el hombre para que te acuerdes de él, el ser humano, para que de él te cuides?» (Sal 8,4-5). Ésta es la cuestión fundamental que hay que plantearse: ¿Quién es el hombre? El hombre es un ser que alberga en su corazón una sed de infinito, una sed de verdad –no parcial, sino capaz de explicar el sentido de la vida– porque ha sido creado a imagen y semejanza de Dios. Así pues, reconocer con gratitud la vida como un don inestimable lleva a descubrir la propia dignidad profunda y la inviolabilidad de toda persona. Por eso, la primera educación consiste en aprender a reconocer en el hombre la imagen del Creador y, por consiguiente, a tener un profundo respeto por cada ser humano y ayudar a los otros a llevar una vida conforme a esta altísima dignidad.

Nunca podemos olvidar que «el auténtico desarrollo del hombre se refiere a la totalidad de la persona en todas sus dimensiones»,3 incluida la trascendente, y que no se puede sacrificar a la persona para obtener un bien particular, ya sea económico o social, individual o colectivo. Sólo en la relación con Dios comprende también el hombre el significado de la propia libertad. Y es cometido de la educación el formar en la auténtica libertad. Ésta no es la ausencia de vínculos o el dominio del libre albedrío, no es el absolutismo del yo.

El hombre que cree ser absoluto, no depender de nada ni de nadie, que puede hacer todo lo que se le antoja, termina por contradecir la verdad del propio ser, perdiendo su libertad. Por el contrario, el hombre es un ser relacional, que vive en relación con los otros y, sobre todo, con Dios. La auténtica libertad nunca se puede alcanzar alejándose de Él.

La libertad es un valor precioso, pero delicado; se la puede entender y usar mal. «En la actualidad, un obstáculo particularmente insidioso para la obra educativa es la masiva presencia, en nuestra sociedad y cultura, del relativismo que, al no reconocer nada como definitivo, deja como última medida sólo el propio yo con sus caprichos; y, bajo la apariencia de la libertad, se transforma para cada uno en una prisión, porque separa al uno del otro, dejando a cada uno encerrado dentro de su propio “yo”. Por consiguiente, dentro de ese horizonte relativista no es posible una auténtica educación, pues sin la luz de la verdad, antes o después, toda persona queda condenada a dudar de la bondad de su misma vida y de las relaciones que la constituyen, de la validez de su esfuerzo por construir con los demás algo en común».4

Para ejercer su libertad, el hombre debe superar por tanto el horizonte del relativismo y conocer la verdad sobre sí mismo y sobre el bien y el mal. En lo más íntimo de la conciencia el hombre descubre una ley que él no se da a sí mismo, sino a la que debe obedecer y cuya voz lo llama a amar, a hacer el bien y huir del mal, a asumir la responsabilidad del bien que ha hecho y del mal que ha cometido.5 Por eso, el ejercicio de la libertad está íntimamente relacionado con la ley moral natural, que tiene un carácter universal, expresa la dignidad de toda persona, sienta la base de sus derechos y deberes fundamentales, y, por tanto, en último análisis, de la convivencia justa y pacífica entre las personas.

El uso recto de la libertad es, pues, central en la promoción de la justicia y la paz, que requieren el respeto hacia uno mismo y hacia el otro, aunque se distancie de la propia forma de ser y vivir. De esa actitud brotan los elementos sin los cuales la paz y la justicia se quedan en palabras sin contenido: la confianza recíproca, la capacidad de entablar un diálogo constructivo, la posibilidad del perdón, que tantas veces se quisiera obtener pero que cuesta conceder, la caridad recíproca, la compasión hacia los más débiles, así como la disponibilidad para el sacrificio.

Educar en la justicia

4. En nuestro mundo, en el que el valor de la persona, de su dignidad y de sus d
erechos, más allá de las declaraciones de intenciones, está seriamente amenazado por la extendida tendencia a recurrir exclusivamente a los criterios de utilidad, del beneficio y del tener, es importante no separar el concepto de justicia de sus raíces transcendentes. La justicia, en efecto, no es una simple convención humana, ya que lo que es justo no está determinado originariamente por la ley positiva, sino por la identidad profunda del ser humano. La visión integral del hombre es lo que permite no caer en una concepción contractualista de la justicia y abrir también para ella el horizonte de la solidaridad y del amor.6

No podemos ignorar que ciertas corrientes de la cultura moderna, sostenida por principios económicos racionalistas e individualistas, han sustraído al concepto de justicia sus raíces transcendentes, separándolo de la caridad y la solidaridad: «La “ciudad del hombre” no se promueve sólo con relaciones de derechos y deberes sino, antes y más aún, con relaciones de gratuidad, de misericordia y de comunión. La caridad manifiesta siempre el amor de Dios también en las relaciones humanas, otorgando valor teologal y salvífico a todo compromiso por la justicia en el mundo».7 «Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados» (Mt 5,6). Serán saciados porque tienen hambre y sed de relaciones rectas con Dios, consigo mismos, con sus hermanos y hermanas, y con toda la creación.

Educar en la paz

5. «La paz no es sólo ausencia de guerra y no se limita a asegurar el equilibrio de fuerzas adversas. La paz no puede alcanzarse en la tierra sin la salvaguardia de los bienes de las personas, la libre comunicación entre los seres humanos, el respeto de la dignidad de las personas y de los pueblos, la práctica asidua de la fraternidad».8 La paz es fruto de la justicia y efecto de la caridad. Y es ante todo don de Dios. Los cristianos creemos que Cristo es nuestra verdadera paz: en Él, en su cruz, Dios ha reconciliado consigo al mundo y ha destruido las barreras que nos separaban a unos de otros (cf. Ef 2,14-18); en Él, hay una única familia reconciliada en el amor.

Pero la paz no es sólo un don que se recibe, sino también una obra que se ha de construir. Para ser verdaderamente constructores de la paz, debemos ser educados en la compasión, la solidaridad, la colaboración, la fraternidad; hemos de ser activos dentro de las comunidades y atentos a despertar las consciencias sobre las cuestiones nacionales e internacionales, así como sobre la importancia de buscar modos adecuados de redistribución de la riqueza, de promoción del crecimiento, de la cooperación al desarrollo y de la resolución de los conflictos.

«Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios» (Mt 5,9).

 La paz para todos nace de la justicia de cada uno y ninguno puede eludir este compromiso esencial de promover la justicia, según las propias competencias y responsabilidades. Invito de modo particular a los jóvenes, que mantienen siempre viva la tensión hacia los ideales, a tener la paciencia y constancia de buscar la justicia y la paz, de cultivar el gusto por lo que es justo y verdadero, aun cuando esto pueda comportar sacrificio e ir contracorriente.

Levantar los ojos a Dios

6. Ante el difícil desafío que supone recorrer la vía de la justicia y de la paz, podemos sentirnos tentados de preguntarnos como el salmista: «Levanto mis ojos a los montes: ¿de dónde me vendrá el auxilio?» (Sal 121,1). Deseo decir con fuerza a todos, y particularmente a los jóvenes: «No son las ideologías las que salvan el mundo, sino sólo dirigir la mirada al Dios viviente, que es nuestro creador, el garante de nuestra libertad, el garante de lo que es realmente bueno y auténtico [...], mirar a Dios, que es la medida de lo que es justo y, al mismo tiempo, es el amor eterno. Y ¿qué puede salvarnos sino el amor?».9 El amor se complace en la verdad, es la fuerza que nos hace capaces de comprometernos con la verdad, la justicia, la paz, porque todo lo excusa, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta (cf. 1 Co 13,1-13).

Queridos jóvenes, vosotros sois un don precioso para la sociedad. No os dejéis vencer por el desánimo ante a las dificultades y no os entreguéis a las falsas soluciones, que con frecuencia se presentan como el camino más fácil para superar los problemas. No tengáis miedo de comprometeros, de hacer frente al esfuerzo y al sacrificio, de elegir los caminos que requieren fidelidad y constancia, humildad y dedicación. Vivid con confianza vuestra juventud y esos profundos deseos de felicidad, verdad, belleza y amor verdadero que experimentáis. Vivid con intensidad esta etapa de vuestra vida tan rica y llena de entusiasmo.

Sed conscientes de que vosotros sois un ejemplo y estímulo para los adultos, y lo seréis cuanto más os esforcéis por superar las injusticias y la corrupción, cuanto más deseéis un futuro mejor y os comprometáis en construirlo. Sed conscientes de vuestras capacidades y nunca os encerréis en vosotros mismos, sino sabed trabajar por un futuro más luminoso para todos. Nunca estáis solos. La Iglesia confía en vosotros, os sigue, os anima y desea ofreceros lo que tiene de más valor: la posibilidad de levantar los ojos hacia Dios, de encontrar a Jesucristo, Aquel que es la justicia y la paz.

A todos vosotros, hombres y mujeres preocupados por la causa de la paz. La paz no es un bien ya logrado, sino una meta a la que todos debemos aspirar. Miremos con mayor esperanza al futuro, animémonos mutuamente en nuestro camino, trabajemos para dar a nuestro mundo un rostro más humano y fraterno y sintámonos unidos en la responsabilidad respecto a las jóvenes generaciones de hoy y del mañana, particularmente en educarlas a ser pacíficas y artífices de paz. Consciente de todo ello, os envío estas reflexiones y os dirijo un llamamiento: unamos nuestras fuerzas espirituales, morales y materiales para «educar a los jóvenes en la justicia y la paz».

Vaticano, 8 de diciembre de 2011
--
Notas
1 Discurso a los Administradores de la Región del Lacio, del Ayuntamiento
y de la Provincia de Roma, (14 enero 2011), L’Osservatore Romano,
ed. en lengua española (23 enero 2011)
2 Comentario al Evangelio de S. Juan, 26,5.

3 Carta enc. Caritas in veritate (29 junio 2009), 11: AAS 101 (2009),
648; cf. PABLO VI, Carta enc. Populorum progressio (26 marzo 1967), 14:
AAS 59 (1967), 264.

4 Discurso en la ceremonia de apertura de la Asamblea eclesial de la
diócesis de Roma (6 junio 2005): AAS 97 (2005), 816.

5 Cf. CONC. ECUM. VAT. II, Const. past. Gaudium et spes, 16.

6 Cf. Discurso en el Bundestag (Berlín, 22 septiembre 2011): L’Osservatore
Romano, ed. en lengua española (25 septiembre 2011), 6-7.
7 Carta enc. Caritas in veritate (29 junio 2009), 6: AAS 101 (2009),
644-645.

8 Catecismo de la Iglesia Católica, 2304.
9 Vigilia de oración con los jóvenes (Colonia, 20 agosto 2005): AAS 97
(2005), 885-886.
© Librería Editorial Vaticana



Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...